El martes 31 de agosto se inaugura en la Galería Espiral “Memoria y mar”, una exposición de obras de Gloria Torner en el año en que el Gobierno de Cantabria ha dedicado a esta gran pintora.
Evidentemente Gloria es memoria y mar. La memoria de una ventana abierta a sus pinceles y a sus ojos vivaces que no pierden ripio de esa película permanente de vida y tiempo que ocurre en su estudio. Es memoria también de poesía y de poetas que han surcado con ella sueños de belleza y que en ella dejaron un nido tejido de sentido y conocimiento. Y ella nos devuelve siempre el Mar. El mar desde su pared transparente con ese infinito alféizar que, como un cuaderno de apuntes donde nacen flores y conchas, nos va sirviendo la narración de un poema continuo. Todo eso, así como quien no quiere la cosa, con desplante torero, con el mismo desparpajo que tienen cuando hablan los verdaderos artistas, sin justificación y con plena libertad. El trazo libre y decidido, el color resolutivo, los hallazgos, los reflejos rápidos. Y hablo de los reflejos rápidos de su perspicaz mirada. Se dice que para pintar hay que saber mirar. No se mira la realidad que es, sino aquella que uno quiere ver. La mirada que construimos. Aquella pintura que uno ve en lo que llamamos realidad. A veces hay artistas capaces de archivar en la memoria las miradas como sensaciones vivas que se nutren de un mismo lugar, su luz y su tiempo, y que como un soplo se hacen reales animadas por un corazón puro. A veces hay artistas. Gracias, Gloria Torner.
M. Sáenz-Messía
La exposición permanecerá abierta hasta el 31 de octubre, con algunas interrupciones por asistencia a la feria Sculto en Logroño y por la celebración de SIANOJA XXI.